un giro de 180º

Y de repente ocurre, ocurre que conoces a alguien por casualidad y te cambia de la nada todo tu mundo dándole un giro de 180º, y justo en el momento que lo miras a los ojos algo te dice que os vais a llevar bien, sabes que sea quien sea y haya sido lo que haya sido va a resultar ser alguien importante para ti y que lo vas a aceptar pase lo que pase, porque des de el minuto uno se ha creado una especie de conexión entre los dos, lo sabes y sabes que él también lo ha notado, sabes que su alma y la tuya por alguna causa desconocida estaban destinadas a encontrarse con el fin de algo, quizás para bien o quizás no, que sé yo. Esto no tiene que ver nada con la atracción, va mucho más allá de todo eso, es como si una fuerza sobre natural, vete tu a saber porqué, hace que dos personas sin apenas conocerse tengan la sensación de haberse conocido des de siempre, algo que ni yo puedo ni sé como explicaros.

Pero os juró que así fue, para tanto fue que no pude llegar a ver que su apariencia no era del todo agradable, por qué cuando todos pasaban por su lado y lo miraban de forma rara, yo sin entender nada solo podía ver delante mía belleza en su alma, porqué cuando todos me juraban haber visto maldad en él y me aconsejaban que me alejará de él, yo por encima de todos apostaba por él, por su potencial como persona, yo sabía que nada de lo que les parecía era lo que él realmente era. Y así, sin escuchar a nadie y en contra del mundo me puse delante de él y lo miré a los ojos, y fue justo en ese momento en el que un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, y no fue nada desagradable, al contrario, fue el escalofrío más agradable que había tenido en todo lo que llevo de vida o al menos que yo recordara. Pues en sus ojos pude ver el color de su alma, blanca y pura, y os prometo que antes de cruzar una palabra con él yo ya sabía casi todo de él, y sus ojos a pesar de ser marrones me hicieron llegar a ver todos y cada uno de los colores, porqué su interior estaba lleno de color y bondad.

Y firmo y reafirmo todo esto, porqué más tarde cuando tuve el prestigio de poder comunicarme con él, cuando estuvimos horas hablando puede llegar a ver lo increíblemente maravillosa que era esta persona. Porqué cuando lo miraba a los ojos me transmitía toda la paz del mundo y no podía hacer otra cosa que confiar, confiar en él, porqué sé que cualquier persona en el mundo puede mentirme, pero unos ojos, unos ojos como los suyos no, sus ojos reflejaban su alma y transmitían todo su interior. Y una persona como él, una persona que te hace llorar de tanto reír teniendo mil y una razones para no sonreír a la vida te hace replantearte las cosas, te hace ver que no todo siempre es lo que parece ser, que antes de juzgar debes conocer, que lo que digan los demás está siempre de más y que quién acierta es siempre porqué arriesga, y yo lo arriesgué, arriesgué mucho por él, arriesgué porqué sabía que no me equivocaría con él y porqué algo en mí me decía que así debía de hacerlo. Porqué a pesar de todo el peso que lleva encima, y a pesar de lo perdido que iba él en la vida ha sabido como hacer que me encuentre yo. Y una vez más le doy las gracias a esa persona que apareció en mi vida sin buscarla, que me cambió todos mis conceptos y me quitó la mayoría de mis prejuicios, y luego sin pedirle ayuda me impulso para que pudiera subir todo lo alto que yo quisiera, porqué sabía que yo podía con todo. Y por una vez en la vida, me sentí llena, llena de esperanza, llena de energía, viva.. porqué por una vez en la vida alguien confiaba en mí, y más que yo misma, era él.

Y a raíz de todo esto, supe encontrarme, supe deshacerme de mis complejos y tirar al suelo mis prejuicios, y supe ver más allá de las palabras de la gente, de sus falacias. Porqué una vez más se cumple mi teoría de que la opinión de la gente no vale de nada si nadie se ha parado nunca a conocer realmente la historia de la gente ni a conocer a cada persona por dentro.